Alimentar a los niños es una tarea de mucha responsabilidad porque es la base para que su cuerpo tenga el sustento necesario para formarse, y nutrirse para su continúo crecimiento. No obstante, la nutrición pre-natal y post-natal son igual de relevantes, lo que se recomienda empezar con una alimentación sana mucho antes del embarazo.

Un punto muy importante es, ser el ejemplo de nuestros niños porque los primeros años están pendientes de lo que mamá y papá hacen, ya que para ellos son sus super héroes. Por tanto, antes de introducirles una alimentación natural y saludable, deben ser los padres los primeros en realizar ese cambio. No habría coherencia si exigimos a los pequeños si nosotros no lo hacemos.

Cómo ir introduciendo los cambios en nuestros hijos:

Siempre hay que hacerlos lentamente, si no hemos tenido costumbre de empezar anteriormente desde el pre-embarazo. Tenemos que ser muy observadores durante este cambio para ver cómo reaccionan y ver que alimentos les agrada más comer. Por tal motivo, debemos ofrecerles variedad de alimentos al principio, y dejarles escoger sin imponer.

Cada día debemos cocinar con alimentos frescos, en especial orgánicos o de agricultores minoristas, con productos locales y de estación. Es necesario, presentar los platos de forma colorida y divertida para que disfrute su sentido del gusto con los ojos y se prepare la digestión, e introducir nuevos sabores para que tengan algo nuevo siempre.

Algo relevante de tener en cuenta en la alimentación de los niños es cocinar sin hacer tantas mezclas, una comida sencilla, de buen sabor y color les agradará. Muchos de los niños han sido educados con alimentación con mucha azúcar y grasas, y los padres deben tener paciencia y actuar con mucho amor para poco a poco enseñarles a comer otro estilo de alimentación, inculcándoles con dibujos, juegos. Si sus hijos son un poco mayores invítales a que cocinen contigo, probando vegetales coloridos, y dejandoles crear un plato o que se atrevan a decorar los suyos.

Debemos estimular a los niños que sigan su propia intuición, y buscar diferentes aliños, salsas, y cocciones hasta encontrar el que desee o agrade a su paladar. Los padres tienen que mostrar positivismo ante el cambio, y actuar con mucho AMOR.

Es muy bueno que el niño a medida que crezca conozca de donde provienen esos alimentos, y conozcan las diversas variedades en vegetales, frutas, cereales, legumbres, menestras, tubérculos y frutos secos. Se debe intentar evitar alimentos procesados o empaquetados porque contienen mucha azúcar y aditivos. El contacto con la naturaleza les ayudará a ser más conscientes de lo que comen.

Vegetales en las comidas :

Son muy importantes para su nutrición, y cada niño tiene sus preferidos, debiendo usarlos en diferentes platos y cocciones. Cuando van creciendo van cambiando de gustos, y lo que no quiso hoy pueda le apetezca mañana, nunca descartar sino observar a tu niño en su condición presente, y variar las verduras para que no se cree rechazo por aburrimiento.

A la mayoría de los niños les atrae los dulces, y muchos vegetales lo contienen, sugiero usar diferentes cocciones para resaltar lo dulce como hervidos cortos, al vapor, escaldado, estofado, salteado, horneados, prensado o a la barbacoa. La calabaza, el camote, el poro, el hinojo, brocolí, coliflor, pimientos, zanahoria, beterraga, todos estos son ricos en dulce y más si los usamos frescos, y con cocción justa sin pasarse. Prueben las diferentes cocciones, usen baja sal, y quiten la azúcar refinada. No utilizar la miel en la cocción, lo pueden hacer moderadamente como aliño.

Si a tu hijo/a no le gusta las verduras, poco a poco elimina el azúcar blanca de su alimentación, y eso incluye pasteles refinados, dulces procesados y chucherías ( gomas, caramelos, chupetines, etc).  Reduce el consumo de líquidos azucarados, gaseosas y frutas de alto contenido de azúcar. Comienza a introducir un par de verduras de manera moderada en sus platos favoritos, decora los platos con colores, y diversos sabores. Siempre hacer aliños dulces, salados y ácidos. Es necesario que en toda alimentación se  despierte los diferentes sabores en nuestras papilas gustativas.

Las sopas :

Las sopas y caldos siempre son muy buenos, en especial, en las estaciones frías. En casa se aconseja preparar caldos mineralizantes que hierban unas cuántas horas, y si tu niño está en pleno crecimiento le vendrá genial, y a su sistema digestivo. Aconsejo que compren un pollo orgánico para el preparado porque los del mercado convencional tienen muchas hormonas, y en la medida que se pueda hay que evitarlos. También podemos hacerles sustancias de bazo de res que le ayudarán a tener un nivel adecuado de proteínas, que al final con un par de cucharadas soperas es suficiente.

Hay un producto que no lo usan mucho pero es muy nutritivo, es el miso, que es la pasta fermentada usada mucho en oriente para condimentar y dar sabor. Yo recomiendo el que esta hecho a base de cebada y con sello orgánico. En Lima se encuentra en tiendas japonesas o chinas. Se puede preparar un rica sopa de verduras y al final echarle una pizca de miso, medida exacta ya que es muy fuerte. Le aporta vitaminas, minerales, proteínas y las enzimas para regular su sistema digestivo. Siendo necesario su consumo dos veces por semana.

Yo les recomiendo introducir en sus dieta las algas, son excelentes para obtener los minerales adecuados para el organismo, y una manera para que se acostumbre a esos sabores marinos que hoy en día hemos olvidado, siendo las algas un alimento altamente nutritivo. Sólo hay que usar un trozo pequeño de alga kombu en el arroz, wakame en las sopas, el cochayuyo para guisos y el cushuro que se usa también en guisos y ensaladas. El agar agar es más usado en verano y primavera por ser refrescante.

Las sopas de verduras son una buena opción con un toque de miso, a las sopas les pueden agregar lentejas finas , garbanzos, pero siempre de un solo tipo, no hay que combinarlas. Se pueden colocar los fideos de letras, munición, coditos, para que ellos se diviertan y coman alegres.

Los cereales :

Tenemos que comenzar a introducir en nuestra alimentación diaria los cereales integrales. Nos hemos acostumbrado mucho al arroz blanco y debemos alternar con el integral para que nuestros hijos aprovechen su poder vital, energético y refuercen su sistema nervioso. Los niños menores de 2 años, prefieren comer los cereales de arroz, avena, quinoa, kiwicha, mijo o cebada bien cocinada donde la proporción de agua es 4 a 5 veces más para que salga como papilla. Una sugerencia es alternar, no siempre hacer lo mismo, un día con manzana, otro con leche de arroz o avena, el siguiente con leche de vaca ecológica, etc.

Las pastas integrales son muy ricas, y podemos darles con verduras, pollo , pescado o un buen caldo de menudencia. Las mollejas cortadas bien finitas son deliciosas y mejor si se mezclan con verduras por ejemplo vainitas, zanahorias en juliana y un poco brocolí dando color a nuestro plato.

No olvidar que los carbohidratos dan energía y son necesarios en la dieta de los pequeños ya que ellos cada minuto desgastan al jugar, y descubrir el mundo.

Las proteínas :

Muchas de las proteínas vegetales son beneficiosas para los niños como son las menestras : garbanzos, lentejas, arverjas partidas. En caso causen un poco de indigestión, hay que tostarlas antes de cocinarlas, y remojarlas un día previo. Es necesario hacerlas puré eliminando su cascara para que los pequeños la coman mejor.

Es mejor evitar carnes rojas con mucha frecuencia, cerdo o carne con mucha grasa. Buscar muy buena calidad de carne que no tengan hormonas, ni alimentación con transgénicos. Saber la procedencia de esas carnes y como se alimentan es necesario porque al final todo entra al cuerpo de nuestros hijos.

Las frutas y los dulces naturales :

Los niños siempre se sienten atraídos por los dulces porque necesitan más que los adultos, en ese caso, debemos darles calidad. Consumir frutas de la estación y locales, frutos secos y endulzantes naturales como miel de arroz, de cebada, jugos naturales sin azúcar, leche de almendras, arroz y avena sin azúcar, mermeladas y cremas que hagamos en casa con la misma azúcar de la fruta y con un toque de melaza. Por tanto, es necesario que escojamos en la compra las frutas con un buen toque de maduración y del tiempo de cosecha para obtener un buen sabor.

Tenemos que evitar que nuestros hijos se acostumbren de la azúcar artificial, de la miel de los supermercados que son pura azúcar, chocolates y helados artificiales. Quizás nos cueste un poco más buscar productos de calidad pero el crecimiento y formación de tu hijo será con buena calidad nutricional.

La importancia de las meriendas y los snacks :

Los niños, continuamente están desgastando energía y por ende necesitan reponer esas energías, lo recomendable es que tengan 3 tiempos para los snacks o pequeñas meriendas repartidas en el día, de manera que no se cruce con las comidas principales, y no impidan que ellos disminuyan su apetito.

Los frutos secos como las almendras, maní (cacahuetes), castañas, las pasas, guindones (ciruelas) junto a las semillas de girasol y calabaza tostadas son una excelente opción. Siempre comprar orgánicos o de muy buena calidad sin aceite.

Están los bocadillos de queso cabra, de pavo , de mermeladas caseras, de omelettes, de hummus, de palta. Dentro de las frutas tenemos  la piña golden en trozos, manzana de diferentes variedades, las peras. y éstas pueden cocinarse con poca agua para que resalte su sabor dulce. Tenemos las galletas de arroz con mermeladas caseras o pasta de algarrobo hecho en casa, palomitas de maíz, barritas de quinua o kiwicha.

Algo que los padres deben tener presente es verificar los ingredientes que contiene los alimentos que compran para sus hijos. Escuchar los gustos de sus hijos, y observar sus estados de ánimo porque van cambiando, y con él, su elección por diversos alimentos. Salir de la rutina es recomendable, al igual que preparar la mesa para comer con tranquilidad y agradecimiento. A los hijos es necesario enseñarles a comer sin stress, sentados, sin televisión y con un ambiente tranquilo para que su memoria aprenda este buen hábito, y lo practique en su crecimiento hacia la adultez.

Me encantará que compartan este artículo con las mamás para que empecemos a darles a los niños una mejor calidad en la nutrición. Pueden escribirme para cualquier comentario o desean participar en algún taller de nutrición energética. Por el facebook compartiré pronto la receta de la sustancia del bazo, que creo importante darles a los peques.

Deseo que les sirva mis recomendaciones, y pronto me cuenten sus experiencias en el proceso de cambio de alimentación de sus pequeños.

Con cariño,